La reciente crisis económica supuso que muchos argentinos se quedaron sin trabajo. La economía se va recuperando poco a poco, pero el trabajo para extranjeros sigue estando muy escaso.
Los extranjeros que hablen español y quieran trabajar por un salario argentino o hacer de asistentes voluntarios (trabajar sin cobrar) es más fácil que encuentren trabajo.
El desempleo ha disminuido desde el momento más álgido en la crisis del 2001. No obstante, hoy, todavía se mantiene alto, aproximadamente en un 12%+.
Argentina siempre atrajo la emigración de otros paises de la zona. Entre otros, los paraguayos, bolivianos y peruanos que trabajan en la agricultura y en el servicio doméstico. Los argentinos consideran a los emigrantes de la zona como una amenaza para los puestos de trabajo.
Legalmente las empresas están obligadas a registrar a los empleados con fines de impuestos y seguridad social. Para mantener bajos los costes, las empresas contratan a gente sin papeles que no están legalmente registrados. En 2005 el gobierno argentino ha empezado una campaña para reducir el número de trabajadores ilegales. Ponen multas tanto a los trabajadores ilegales como a las empresas que los contratan.